Texto: Josefina Salomón
“Si alguien entra en una ciudad y pone un hotel con pecios irrisorios, con el objetivo de lavar dinero, no solo está facilitando la entrada de dinero ilícito, sino que distorsiona la economía local con una competencia desleal.”
Así explica el impacto del lavado de dinero Alejandra Freire, abogada e investigadora experta en lavado de activos. Dice que la falta de información sobre las formas en las que se lleva a cabo, así como la participación de las mujeres en organizaciones criminales son dos de las razones que dificultan las investigaciones y permiten que esta economía ilegal siga creciendo.
Hablamos con Freire, quien liderará un panel en el seminario internacional organizado por Amassuru “El crimen organizado en América Latina desde un enfoque feminista” el 22 de noviembre. Esto es lo que nos dijo.
In.Visibles (IV): En el panel que vas a liderar, se discutirá el abordaje de género en las investigaciones sobre lavado de activos. ¿Qué quiere decir esto?
Alejandra Freire (AF): En el caso de Argentina en particular, la mayoría de las organizaciones criminales tienden a tener una estructura familiar y la mayoría de las causas de lavado de dinero que vemos responden a esas dinámicas de familia. Son hermanos, hermanas, parejas, padres que hacen autovalado, es decir, ingresan el dinero que la misma organización criminal, que es una familia, generó ilegalmente al mercado legal.
Sin embargo, cuando se realizan las investigaciones de este tipo de delitos no se suele analizar la perspectiva de género. Cuando se hace, puede verse claramente que entre los factores que impactan en el delito están las relaciones entre miembros de una familia, el rol que cumple cada una, en particular las mujeres, la edad, etc y eso es importante a la hora de establecer las penas.
IV: Se dice que Argentina es un país donde existen muchas facilidades para lavar dinero…
AF: Sí, en Argentina y otros países, sobre todo en América Latina, porque el lavado de activos va de la mano del avance de la criminalidad organizada en la región y de la diversificación de los mercados criminales, facilitada por la corrupción. Sin corrupción, no hay avance ni de crimen organizado ni de criminalidad económica en general.
En Argentina, varios factores, incluyendo lo común que es el uso de dinero en efectivo para operaciones grandes y la falta de recursos de los organismos de control, facilitan el lavado.
La Unidad de Información Financiera es el organismo nacional que recibe la información sobre denuncias sobre lavado de dinero, que la trata y que la tiene que transmitir al Ministerio Público Fiscal para que se inicien las investigaciones financieras. Pero si no tiene información sólida es muy difícil que pueda analizar los hechos ni establecer políticas públicas.
En materia de prevención, desde 2011 se está poniendo mucho foco en la intermediación financiera no autorizada, es decir cuando una entidad no autorizada recibe depósitos del público y los presta, lo que llamamos “cuevas”. El enfoque que se está poniendo en eso tiene que ver también con el avance la utilización de criptomonedas.
IV: ¿Cómo impacta esto a las investigaciones sobre narcotráfico?
AF: En Argentina lo que se observa es que no se inician las investigaciones financieras desde el inicio de las causas judiciales. Entonces, por ejemplo, cuando se inicia una causa por narcotráfico se obtienen los datos que podrían ayudar a determinar cuáles son los bienes de origen ilícito que una organización tiene, pero al no iniciar las investigaciones financieras desde el inicio, es muy difícil poder determinarlos. Esto es algo que es muy difícil de hacer cuando concluyen las causas, que en Argentina tardan en un promedio de 14 años y no siempre hay condenas. Para ese momento probablemente ya no se cuente con los activos y de pierde la posibilidad de decomisarlos y, de alguna forma, reparar un daño a la sociedad.
Esto ocurre a pesar de que en 2006 la Procuración General sacó la primera resolución que ordenaba a los fiscales investigar la materia financiera desde el inicio de los procesos relacionadas al narcotráfico. Además, en 2011, el Código Penal estableció que desde el principio de las investigaciones los jueces tienen que establecer las medidas cautelares que sean suficientes para poder determinar cuáles son los activos que van a ser posible objeto de decomiso. Pero si no se tiene investigación financiera, todo eso es muy difícil.
IV: Seguir la ruta del dinero es clave a la hora de investigar el narcotráfico. ¿Por qué no se hace?
AF: Pienso que una razón importante es la falta de coordinación entre los organismos reguladores, que son quienes tienen la información desde el primer momento.
Te doy un ejemplo con relación a eso. Hay una causa en la provincia de Córdoba con una empresa que hacía intermediación financiera no autorizada. En el marco de la investigación, que se inició por una denuncia, saltó que esta empresa estaba inscripta en la AFIP (Agencia Federal de Ingresos Públicos) como una entidad financiera, pero solo podría haberse inscripto si estaba habilitada por el Banco Central. Es paradigmático, porque a la AFIP no le saltó ninguna alerta y no hubo tampoco ninguna alarma por parte de los bancos donde tenían depositados sus activos, es decir, hubo desprolijidades de todos lados que responden a esa falta de coordinación.
IV: Pensando en el rol de las mujeres en las economías ilegales ¿qué papeles cumplen en dinámicas de lavado de activos?
AF: Hay algunos informes que muestran, sobre todo en relación al narcotráfico, que las mujeres tienen un rol bastante importante en materia de logística, de contabilidad y lavado de activos. Ahora, si vamos a Argentina, no hay datos desagregados sobre cuestiones de género, lo que es un problema.
No tenemos un registro único de todas las condenas de lavado de activos, que es un deuda, incluido del Ministerio Público y el Poder Judicial.
IV: Parecería que se el lavado de activos se habla poco…
AF: Si, eso es en parte porque las consecuencias del lavado son menos visibles. Sin embargo, el lavado de activos no solo afecta al sistema financiero de los Estados, sino que afecta, indirectamente, a la salud pública, a la administración de justicia, a la vida de las personas, a la competencia de las empresas. Es decir, va generando grietas en distintos sectores sociales, económicos, políticos porque hace que falte dinero para la implementación de políticas públicas.
Sin mecanismos eficientes de lavado de dinero, el narcotráfico no podría existir. Por eso se insiste en las investigaciones desde el inicio y en seguir la ruta del dinero, porque el dinero es lo que les da a las organizaciones el poder para corromper, para establecerse.
Quien va a lavar activos no quiere ganar dinero, lo que quiere es insertarlo como si hubiese sido obtenido de una forma lícita, entonces genera una enorme distorsión de precios. Entonces, si lo que quiero es lavar activos, puedo poner un hotel cinco estrellas a precios mucho menores, porque lo que me interesa es demostrar que gané dinero de una forma lícita, y ahí es cuando afecta a la economía en general, porque hay una competencia desleal.
IV: Por último, ¿Cómo ves la perspectivas a futuro?
Creo que es clave que los países podamos enfocar nuestras investigaciones de acuerdo a nuestros propios riesgos y nuestra propia cultura, más que en base a exigencias de organismos internacionales como el GAFI, que no tienen en cuenta los contextos particulares.
Te doy un ejemplo. En materia de lavado de activos, se ha observado cada vez más uso de criptoactivos, incluyendo como rampa para luego obtener dólares. Es decir, como rampa hacia el sistema financiero tradicional.
En Argentina, que es uno de los países con más usuarios de criptomonedas, el GAFI nos exigía que cumpliéramos con la regulación de los proveedores de servicios tecnológicos del mundo cripto por medio de un registro o un sistema de licencia. En el apuro se estableció que cualquier persona física, nacional o extranjera, podía registrarse, que no necesitaba tener un CUIT (una clave de identificación tributaria), lo que pasa ahora es que es muy difícil supervisar a esos que están en el extranjero.
Entonces, resulta que hasta que no empecemos a ver nuestros propios contextos, nuestros propios recursos, nuestros propios riesgos, va a ser muy difícil poder avanzar, tanto en prevención como en persecución.
Esta entrevista ha sido resumida y editada para mayor claridad.
El seminario internacional, organizado por Amassuru: “El crimen organizado en América Latina desde un enfoque feminista” tendrá lugar en Buenos Aires, Argentina, el 22 de noviembre. Los detalles de suscripción y acceso a la transmisión del evento están disponibles aquí.